donar
historias

Bienvenidas, bienvenidos a la Familia de la Misericordia — Reflexiones de la Hermana Mary Kay Dobrovolny por el Día de la Madre

From left to right – Sister Mary Kay’s father (John Dobrovolny), Sister Mary Kay’s mom (Mary Ann [McDermott] Dobrovolny), Sister Mary Kay’s aunt (Pat McDermott RSM), and Sister Mary Kay Dobrovolny RSM) celebrating Pat’s 50th Jubilee and Mary Kay’s 25th Jubilee as Sisters of Mercy. October 2016.
From left to right – Sister Mary Kay’s father (John Dobrovolny), Sister Mary Kay’s mom (Mary Ann [McDermott] Dobrovolny), Sister Mary Kay’s aunt (Pat McDermott RSM), and Sister Mary Kay Dobrovolny RSM) celebrating Pat’s 50th Jubilee and Mary Kay’s 25th Jubilee as Sisters of Mercy. October 2016.
idiomas
compartir
Share this on Facebook Share this on Twitter Print

¿Qué significa para una madre cuando su hija ingresa a la vida religiosa? ¿Cómo influye o responde una madre a la decisión de su hija de profesar votos de pobreza, obediencia, castidad y servicio? Con el Día de la Madre en camino, hablamos con la Hermana Mary Kay Dobrovolny, quien reflexionó sobre las formas en que su madre la inspiró a servir a Dios y al mundo como Hermana de la Misericordia.

Las vocaciones religiosas no son una novedad en la familia extensa de la Hermana Mary Kay Dobrovolny. Su tía es la Hermana Patricia McDermott, RSM, presidenta de las Hermanas de la Misericordia de las Américas. Esta familiaridad, sin embargo, no impidió que los padres de Mary Kay, Mary Ann y John, fueran tomados por sorpresa cuando ella anunció inicialmente sus intenciones de ingresar a la vida consagrada.

Su madre Mary Ann fue educada en escuelas de la Misericordia y estaba familiarizada con la vida religiosa, con su propia hermana en la misma orden; sin embargo, el temor de una madre de «perder» a su hija para la Iglesia se apoderó de ella.

Esos miedos, sin embargo, resultaron ser injustificados. Hermana Mary Kay notó cuán involucrada y solidaria estuvo su madre a lo largo de su vida como hermana:

«Durante mis 27 años en la comunidad, mis padres siempre han estado entusiasmados por ser parte de mi vida. Se reúnen con mis amigas y amigos de la Misericordia, me visitan en los lugares de mi ministerio y han estado en cada celebración clave de mi vida en la Misericordia. A veces, como en mi profesión de votos y la celebración de mis 25 años en la comunidad, mi madre ha irradiado de alegría y deleite».

Hermana Mary Kay señaló también que esta experiencia era nueva para su madre porque cuando la hermana de su madre, Hermana Patricia McDermott, ingresó a las Hermanas de la Misericordia, el contacto familiar no era tan frecuente y era difícil mantenerse conectadas.

De izquierda a derecha: Hermana Mary Kay Dobrovolny RSM, la madre de la Hermana Mary Kay (Mary Ann Dobrovolny) y la tía de la Hermana Mary Kay (Hermana Pat McDermott, RSM) frente al Mercy International Centre, Dublin. Abril de 2012.
De izquierda a derecha: Hermana Mary Kay Dobrovolny RSM, la madre de la Hermana Mary Kay (Mary Ann Dobrovolny) y la tía de la Hermana Mary Kay (Hermana Pat McDermott, RSM) frente al Mercy International Centre, Dublin. Abril de 2012.

Ahora que las cosas han cambiado, Hermana Mary Kay no sólo recibió el apoyo de su madre durante su tiempo como hermana, sino que también se fortaleció la conexión de su madre con las Hermanas de la Misericordia. Hermana Mary Kay dijo:

«Mi madre describe mi entrada como su bienvenida a la familia de la Misericordia. La comunidad de la Misericordia ha estado muy atenta a mis padres y ha llegado a ellos con amistad y espíritu de acogida…Ha sido una vida rica y maravillosa para mí como Hermana de la Misericordia, con más dones aún ya que mis padres han podido ser parte de este caminar de la vida en Misericordia».