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edad 89

Hermana Elizabeth Mattus fue una Hermana de la Misericordia por 70 años. Obtuvo licenciatura de la Universidad de Santa Rosa, Albany y recibió subvenciones de la Fundación Nacional de Ciencias para Ciencias y Ciencias Terrestres. Ella enseñó en muchas escuelas de la diócesis de Albany, inclusive San Patricio y San José, Albany; San José, Scotia; Nuestra Señora de la Victoria, Troy; San Patricio, Cohoes; Santa María, Gloversville; Santa María, Ballston Spa y San Juan, Rensselaer. Por muchos años, ella enseñó a los pequeños los fundamentos de leer, escribir y matemáticas antes de compartir su conocimiento de ciencias generales y ciencias terrestres con estudiantes de secundaria.

No solo fue muy creativa Hermana Elizabeth, sino que le gustaba compartir sus dones. Ella enseñó arte a estudiantes de primer a octavo grados en las Escuelas Unificadas de Cohoes: Santa Inés, San José y Santa María. Ella tenía el don de fomentar los dones artísticos escondidos de las demás personas y dar confianza a los jóvenes, frecuentemente para la sorpresa y encanto de sí mismos. Ella compartió su habilidad como maestra de arte y manualidades en el Colectivo de Manualidades en Albany, ofreciendo instrucción de arte en tela, tejido, caligrafía, cerámica y artesanías naturales. Siempre lista para probar algo nuevo, Hermana Elizabeth aprendió a hacer macramé y serigrafía. ¡Son afortunadas las personas recipientes de una de sus obras maestras! Su devoción de toda la vida a nuestra Madre Bendita se refleja en mucho de su arte.

Hermana Elizabeth cambió de enseñar en el salón de clase a una nueva área de enseñar cuando abrazó el ministerio de cuidado pastoral en Nuestra Señora de la Misericordia, Albany y San Clemente, Saratoga. Con la meta de guiar y ayudar a las personas laicas a aumentar su participación, facilitó que ellas tomaran responsabilidad por los programas de la parroquia.  Dirigió sus dones a ministerios litúrgicos, visitación, actividades sociales, apoyo para personas en luto, responsabilidad para los edificios e instalaciones y el eficaz funcionamiento de la parroquia.

Visitar a personas enfermas y confinadas en casa en el Asilo del Buen Pastor en Saratoga y el Hogar de la Herencia en Schenectady fue un ministerio muy querido para Hermana Elizabeth.